Seguidores

jueves, 3 de mayo de 2012

simplemente..

Me gusta la palabra fuerte. Porque quizás la palabra fuerte no tenga por qué referirse a una persona musculosa, que va dando puños por la vida. Me gusta la fortaleza porque va unida a la valentía, ya que no todo el mundo es lo suficientemente valiente como para ser fuerte.Ser fuerte requiere un esfuerzo, porque implica no dejarse caer por cualquier cosa, no dejar que un viento te tumbe, no dejar que una piedra te haga caer para siempre... Y eso requiere fuerza. La palabra fuerza me inspira mucho respeto, porque quien es capaz de ser fuerte y salir de las adversidades no merece menos. Me gusta la frase que dice "nadie dijo que la vida fuera fácil, pero si que merecerá la pena vivirla". Porque cuando te das cuenta de que has salido de algo duro, te sientes capaz de todo. Porque querer ser fuerte, o simplemente serlo te quita cualquier barrera de tu camino, y te impide sentir miedo por muchas cosas. No creo que creerse fuerte sea simbolo de prepotencia o de autoritario. No me refiero a la fuerza de imponerte ante el resto de personas, sino a la fuerza de oponerte a las barreras y a las dificultades de la vida.
Ser fuerte solo tiene ventajas, porque nunca vas a caer definitivamente ante un problema, nunca un palo será lo suficientemente fuerte como para quitarte las ganas de vivir, siempre vas a querer más y nunca, nada ni nadie va a poder derrotarte. Las personas fuertes seguramente lloren, e incluso creo que son de las que más lloran, pero lo bueno que tienen es que saben en que momento llorar y en que momento dejar de hacerlo. Saben cuanto tiempo hay que dedicarle a cada lagrima, y cuanto tiempo hay que dedicarle a luchar. Por eso, hoy me siento más fuerte que nunca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario