Casi puedo verlo ese sueño que estaba soñando... pero entonces escucho una voz dentro de mi cabeza diciendome: "tu nunca lo alcanzarás" y de repente, siento que cada paso que estoy tomando, cada movimiento que hago, se siente perdido, sin una dirección, y parece que mi fe se está perdiendo...pero después es ahí cuando me doy cuenta de que tengo que seguir intentándolo tengo que mantener mi cabeza bien alta, tengo que ser fuerte.
Porque siempre hay que subir una montaña, elegir tan solo una de tantas y ante todo siempre hay que que querer ascender y seguir ascendiendo, y sí, sé que va a ser una batalla difícil y, a veces, voy a tener que perder; pero también sé que no se trata de la rapidez con que llegar a lo alto, que no es sobre lo que está esperando al otro lado de la montaña,lo más importante es la subida: es el trayecto realizado lo que te hace ser fuerte, las batallas perdidas, las luchas que se van presentando en esta montaña, las posibilidades; y como todos, a veces, me golpeo y sufro, pero sé que no me estoy rompiendo, sé que este dolor y estos momentos son los que más voy a recordar para poder después seguir adelante, para saber cada día que tengo que ser fuerte y que tengo que continuar subiendo sin rendirme ante cualquier golpe.
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